Instituto Terra es el proyecto ambicioso imaginado por el celebro fotógrafo brasileiro, Sebastiao Salgado y su mujer Lélia Deluiz Wanick. Una vez de vuelta en las tierras nativas de Sebastiao, en Aimores (Minas Gerais), la región anteriormente verde por su mata atlántica se había convertido en una tierra infértil y quemada a donde la erosión mostraba las venas rojas de la tierra. Los árboles, el olor de las suaves flores, el canto de los pájaros: todo había desaparecido. Entonces, Lélia tuvo la ingeniosa idea de replantar totalmente la estancia Bulcão del padre de Sebastiao
Es en 1998 que el gobierno acepta por primera vez de atribuir el título de RPPN (reserva privada del patrimonio natural) a una reserva en la cual no había ningún árbol plantado. Un compromiso atrevido que hoy en día muestra los resultados. El trabajo es impresionante e irreal. La primera siembra fue realizada en diciembre 1999 y, anos después anos, han logrado a plantar más de 2,7 millón de arboles.
2000
2012
Actualmente, además de haber restaurado 555 hectáreas de bosque, la institución es una fuente de empleo importante en la región. De hecho, actualmente, la institución contabiliza más de 70 empleados.
El bosque atlántico es un tema aterrador en Brasil. En a pena 30 años, la ganadería ha reducido el bosque en polvo. En todo Brasil, queda menos de 10% de este bosque. A Aimorès, los resultados son para llorar: 0,30% de bosque atlántico. Agregándose a la ganaría, las explotaciones mineras contribuyen también a la deforestación. Estamos en Minas Gerais: minas generales.
Los ciclos de reforestación
La primera etapa de replantación se pasa en el laboratorio, a donde numerosas semillas son traídas. Estas son colectadas en un perímetro de 200 kilómetros. Según la especie, están puestas al frigorífico para facilitar la germinación o directamente dispuestas al exterior.
La segunda etapa se desarrolla en “el vivero” donde más de un millón de plantas pueden ser almacenadas. Las plantas son clasificadas según sus preferencias (sombra, luz, poco o mucho agua). Un mantenimiento constante es asegurado hasta que sean plantadas al principio de la primavera y durante el verano.
Al inicio, 200 especies fueron traídas. Actualmente, solo 100 siguen utilizadas. Wellger Salomao, técnico agrónomo, nos confía “Al inicio, no sabíamos cual especies eran las más adaptadas al entorno, al clima etc… Después de 17 anos, somos capaz establecer una lista de las esencias que se adaptan perfectamente a estas tierras.
Actualmente, Una media de 18 000 plantas son puestas en tarro cada día.
En 17 años la vida ha vuelto.
En cuanto a la fauna, muchas especies que habían anteriormente desaparecido de la región han vuelto a encontrar un refugio en la estancia Bulcão.
Actualmente, se encuentran 172 especies de pájaros, cuyos seis son en peligros de extinción.
33 especies de mamíferos, cuyos 7 son en vía de extinción mundial. También 16 especies de anfibios y 15 de reptiles.
La tierra de color roja tiene una fertilidad natural muy alta. Pero es también muy sensible a la erosión. Un factor que obliga a una replantación urgente. Estos 17 años fueron suficiente para que reaparezcan varias fuentes de agua, afluentes del rio Doce.
¿y Por el futuro?
Durante los próximos años, unos de los objetivos es restaurar 1500 hectáreas de bosque atlántico.
¡No es todo! Instituto Terra ha lanzado un nuevo proyecto llamado «OLHOS D´ÁGUA». Este programa empezó en 2010 y tiene por objetivo recuperar, en 7 regiones de Minas Gérais, las fuentes de agua, afluentes del Rio Doce. Un estudio estima 300 000 fuentes de agua posibles y utilizables.
Para llevar este proyecto al éxito: El instituto encuentra a los diferentes productores de tierras en los alrededores del Rio Doce. Una vez las fuentes localizadas, son protegidas por una valla, impidiendo al gado de compactar el suelo en los alrededores de la fuente. Una vez esta etapa completa, la replantación empieza. Al curso del tiempo, la fuente crece para dar de nuevo la vida. El suelo quemado se convierte en pasto.
El trabajo es enorme y considerable, pero el instituto nos muestra que todo es posible. Por el año 2030, la meta es haber restaurado 75 000 fuentes de agua del Rio doce.
Actualmente, los bosques del mundo siguen sobrexplotados. Según los estudios, en los país tropicales, solo se planta un hectárea para 10 deforestados. La bien conocida Amazonia es el pulmón un nuestro planeta, permitiendo de absorber el monóxido de carbono y metano emitidos en cuantidades abusivas por la actividad de nuestra sociedad. Las últimas noticias nos informan que China deforesta ilegalmente los últimos bosques del continente africano. Sin bosque, nuestro destino es inseguro. El trabajo realizado por el Instituto Terra no muestra que en un corto plazo de tiempo, es posible reconstruir. Entonces: ¿que esperamos para actuar?
Resultados del Instituto Terra